viernes, 7 de enero de 2011

Perro negro espectral



Rondaba de noche los suburbios, cansado con andar lento,
El cofre del auto, junto con el techo, sonaba bajo la tormenta,
Como un sonámbulo, conduciendo con los ojos adormecidos,
Entre sueño y sueño, pensando… divagando, recordando.


Sumido en mis pensamientos, mi corazón se detuvo un momento
Pisé el freno tanto como pude con mis sueños rotos,
un perro negro espectral cruzó corriendo la calle,
No estaba seguro de haberlo visto con claridad. Yo Dudo.


En la noche sonaba un tono de fantasía o de terror,
Como si algo extraño fuera a suceder pronto,
mas era tarde cuando llegué al hogar, dulce hogar,
pero en la entrada de la casa, otra vez, ese perro negro espectral.


Sentado, enseñando las fauces,
Sus ojos destellaron al acercarme
Y al apagar las luces de mi auto
El perro negro espectral se esfumó al momento.


Cada noche era peor que la anterior,
Cada día más ennegrecido, lúgubre,
Me desperté temprano por un mal sueño,
Era el perro negro espectral, acosándome mientras duermo.


Sudaba al momento de levantarme,
Nunca antes un sueño me ha hecho daño
Lo que se esconde en la mente nunca saldrá,
Mañana será otro día, si es que no muero mientras duermo.


La luz del día me levanto el ánimo al amanecer,
Los recuerdos de depresión y agonía se habían ido.
Café, trabajar, almorzar. Espero poder descansar,
espero no tener que trabajar todo el día.


Al aflojar mi corbata me sentí libre,
Y al sentir la libertad recordé la opresión,
Otro día acabado, devorado por la depresión.
Por los horrores que se esconden al caer la noche.


Pasó menos que un parpadeo, enterrado en la noche,
pero el perro negro espectral esperaba oculto junto al auto,
Con ojos demoniacos, mostraba sus fauces,
Amenazando con llevarse un alma… y yo solo.


A máxima velocidad, un vehículo irrumpió la calle,
Destellando, ahuyentando al perro negro espectral
¡Qué horrible maldición la mía! Sufrir el acoso de tal bestia,
Sufrir, sin haberlo merecido, no hay más grande injusticia.


¿Cuándo el perro negro espectral aparecerá?
¿Será a la mitad de la noche cuando esté dormido?
¿O cuando menos yo lo espere?
La tensión me envenenaba lentamente.


Me desperté antes del alba, en la oscuridad
Sudando, con el corazón golpeando duro,
Otra vez ese perro negro espectral,
Acosándome en cada esquina… en cada sueño.


¿Qué desea el perro negro espectral? ¿Qué es?
¿Por qué no se va, por qué no me deja en paz?
¿Por qué nadie lo puede ver, a este perro negro espectral?
Juega con la mente, sus trucos son desconocidos.

Veo a esta Bestia negra espectral en todos lados,
En el trabajo, en el camino, en el auto, en los sueños,
Empezó poco a poco, pero pronto me devoró todo.
Mi vida, mi mente, mi alma y todo.